Tony Geraldo y Álvaro Pereira tenían un objetivo fijo: Conseguir “unos bíceps como los de Arnold Schwarzenegger” y por eso consumieron anabolizantes para caballos
Los fisicoculturistas brasileños Tony Geraldo, de 49 años, y Álvaro Pereira, de 50, confesaron a la prensa local que, “hubo un tiempo que éramos adictos a los esteroides”, y reconocieron que se “pinchaban” con una sustancia llamada Potenay B12, comúnmente empleada por veterinarios a animales.
“Nuestro entorno se encargó de evitar que acabemos mal”, aseguró Pereira, quien también es conocido por su apodo: “Conan”, referido al musculoso personaje de ficción del siglo 20.
“Hulk”, padre de tres hijos y que padece las consecuencias del exceso de esteroides en su cuerpo, detalló al “Daily Mail”: “Le digo a mi esposa que ella es la única que no me quiere. A otras mujeres les encanta mi tamaño. Tiene que aceptarme como soy, o tendremos que seguir nuestros caminos por separado”.
Los oriundos de Rio de Janeiro tenían como referente a Arnold Schawrzenegger, y fue por él que comenzaron a inyectarse diversos productos químicos, actualmente sus bíceps alcanzan, y superan, los 60 centímetros.
La sustancia en cuestión se llama Potenay B12 y se encarga de acelerar el crecimiento de los músculos, además de estimular el aumento de peso. Habitualmente los veterinarios usan este producto en animales. A su vez, los culturistas también pasaron por el Synthol, el cual se utiliza para aumentar y endurecer los músculos.
El químico, que parece extenderse en el ambiente del fisicoculturismo brasileño con el paso del tiempo, es altamente adictivo y provoca depresión, daños en el hígado y en los riñones, según diversos blogs de salud.
“Lo tenemos bajo control. La gente cercana no me dejaría ir nuevamente por el mal camino, y yo hago lo mismo con mi hermano. Queremos ser más ‘grandes’, pero siempre le digo que tenemos que tener cuidado”, concluyó Pereira. infobae.com