Las operaciones comenzaron antes del previsto debido a que esta tercera jornada de salvamento tendrá lugar entre intensas lluvias. Se espera que las tareas sucedan de manera escalonada y tras la salida los rescatados sean trasladados en helicóptero al centro sanitario
Los ochos menores ya rescatados se encuentran en buen estado de salud y permanecen ingresados en el hospital de Chiang Rai, capital de la provincia homónima y donde se encuentra la cueva.
Se espera que, al igual que en las dos anteriores jornadas, las tareas de salvamento sucedan de manera escalonada y tras la salida los rescatados sean trasladados en helicóptero al centro sanitario.
El primer ministro de Tailandia, Prayut Chan-ocha, visitó anoche a los niños hospitalizados y los familiares de estos horas después de personarse en las proximidades de la cueva para agradecer el trabajo de las más de 100 personas que participan en los operativos.
Los buzos, junto a las personas atrapadas, tienen que superar un laberinto de galerías parcialmente inundadas y con desniveles, en un camino donde tienen que bucear con visibilidad nula, escalar y caminar entre el fango y las rocas.
Los niños, muchos de los cuales no saben nadar, comenzaron a tomar sus primeras lecciones de buceo la semana pasada una vez que fueron encontrados tras nueve días de intensa búsqueda.
Las precipitaciones que desde la madrugada azotan la región son una de las principales preocupaciones de las autoridades, debido a que el agua filtrada por el monte puede volver a inundar las galerías y anular el drenaje efectuado.
Equipos militares se encuentran en el monte con la tarea de bloquear la entrada de agua hacia los túneles subterráneos.
Los trece -doce escolares de entre 11 y 16 años y su tutor de 26- se internaron en las galerías hace más de dos semanas tras finalizar un entrenamiento de fútbol cuando una súbita tormenta comenzó a inundar la cavidad y les cortó la salida. infobae.com