Por Ney Santana
Santiago, RD.- Con los honores militares, dirigentes y militantes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y de diferentes estratos sociales, encabezados por el presidente de la República, Danilo Medina fueron sepultados al mediodía de ayer jueves los restos mortales de Ramón María Rodríguez (Monchy), quien a la hora de su deceso se desempeñaba como director general de Pasaportes.
Los restos del presidente del Comité Municipal del PLD en Santiago y miembro del Comité Central de esa organización fueron sepultados a las 12:22 minutos del mediodía en el cementerio del Ingenio, en esta ciudad de Santiago.
Previo al sepelio, el presidente Danilo Medina asistió a la misa de cuerpo presente realizada ayer jueves a las nueve de la mañana en la Catedral Santiago Apóstol El Mayor, de esta hidalga ciudad, por el fallecimiento de Ramón (Monchy) Rodríguez, director general de Pasaportes, quien fue sepultado a las 11 am en el cementerio municipal de El Ingenio.
El día anterior, el miércoles por la tarde, el ex presidente de la República y presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Leonel Fernández, asistió al velatorio Monchy Rodríguez realizado en la Funeraria Blandino.
A la misa de cuerpo presente se dieron cita Flavio Darío Espinal, consultor Jurídico del Poder Ejecutivo; los aspirantes presidenciales por el PLD Carlos Amarante Baret y Francisco Domínguez Brito.
Radhamés Camacho, presidente de la Cámara de Diputados; el senador Julio César Valentín, la gobernadora provincial, Aura Toribio, la fiscal Luisa Liranzo, Marino Collante, director del Departamento Aeroportuario, además, de Fernando Rosa y Julián Serulle.
También dirigentes altos y medios, así como simpatizantes del PLD acudieron a los funerales.
La bandera nacional fue colocada en el féretro donde reposaba el cuerpo de Monchy Rodríguez.
Monseñor Tomás Morel, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santiago, al oficiar el acto religioso, destacó las virtudes de Monchy Rodríguez, especialmente como hombre público y pidió consuelo y esperanza para sus familiares.
En el acto religioso participaron como cocelebrantes el también obispo emérito auxiliar Valentín Reynoso y el padre Nino Ramos.
En representación de la familia de Monchy Rodríguez pronunció algunas palabras Carlos Márquez, su amigo de infancia.
Rodríguez nació en Montecristi, pero siendo niño fue traído a esta ciudad de Santiago, donde sus padres se radicaron en el ensanche Bermúdez, ubicado en la parte baja de aquí.
El cuerpo del también presidente del Comité Municipal del PLD en Santiago y miembro del Comité Central de esa organización política, quien falleció la madrugada del miércoles, fue velado desde la tarde de ese día en la funeraria Blandino, luego fue traslado a la Catedral.
Centenares de personas de diferentes partes del país fueron entre la tarde del miércoles y las primeras horas de la mañana del jueves a la Funeraria Blandino, entre ellos el expresidente Leonel Fernández y su esposa, la vicepresidente Margarita Cedeño de Fernández.
El panegírico fue pronunciado por Carlos Amarente Baret, alto dirigente del Partido de la Liberación Dominicana y precandidato presidencial, quien destacó que Monchy Rodríguez fue un dirigente político que no albergaba rencores, fiel al pensamiento del profesor Juan Bosch y siempre propugnó por la unidad del PLD.
Amarante Baret dijo que “bajo un manto de llanto y dolor nos congregamos en este camposanto para darle la despedida física a Ramón María Rodríguez Flores, nuestro inolvidable Monchy”.
Amarante Baret resalta cualidades del dirigente fallecido
Carlos Amarante, aspirante a la nominación presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD, proclamó que el fenecido presidente del Comité Municipal de la organización en Santiago, Ramón María Rodríguez Flores (Monchy) fue un dirigente político que no albergaba rencores, fiel al pensamiento del profesor Juan Bosch y siempre propugnó por la unidad del PLD.
Amarante, quien leyó el panegírico en el funeral de Rodríguez con la presencia del presidente Danilo Medina, los familiares del fallecido dirigente político y una gran cantidad de personas que asistieron al cementerio de El Ingenio, donde fue sepultado ayer jueves, llamó a la unidad del PLD, como era el deseo del fenecido.
Dijo que “bajo un manto de llanto y dolor nos congregamos en este camposanto para darle la despida física a Ramón María Rodríguez Flores, nuestro inolvidable Monchy”. Afirmó que desde su niñez éste se dedicó al trabajo en una fábrica de calzados para ayudar en la manutención del hogar paterno.
“No albergaba rencores. Me decía que la lucha política se tornaba muy personal en nuestro país y que él no estaba en esa línea”, indicó Amarante, quien afirmó que el fenecido dirigente peledeísta, con quien mantuvo una estrecha relación política y de amistad, había elegido estar del lado de los desposeídos, de los obreros, de los estudiantes y de la cultura popular.
“Simplemente decidió ser un militante en la lucha por la democracia, la justicia social y el progreso de su pueblo”, afirmó.
Definió a Monchy Rodríguez como un hombre inteligente, decidido, con valor y una capacidad de trabajo que no abunda en estos días. Agregó que estas virtudes le ayudaron a ser promovido rápidamente en el Partido, ocupando posiciones de dirección desde muy joven hasta ser elegido miembro del Comité Central del partido y luego presidente del Comité Municipal de esta ciudad de Santiago.
Reveló que trabajó muy de cerca con el dirigente fallecido, “y sé que todos los que le conocieron en el PLD estarán de acuerdo en su responsabilidad en el cumplimiento de las tareas asignadas, de su incansable vocación al trabajo fuerte en la base de la organización. Fue un militante de resultados”.
Le atribuyó capacidad, una sólida formación política y un fino olfato político para trazar planes y estrategias, cualidades que lo convirtieron en uno de los líderes más importantes del partido en Santiago, en la región y del país.
Recordó que a la corta edad de 12 años, Monchy Rodríguez inició su vida laboral como operario en la industria del calzado, su militancia en movimientos de izquierda en su época de estudiante, dirigente clubístico y su ingreso en uno de los círculos de estudios del PLD en 1979.
A Monchy le sobreviven su esposa Eugenia Fernández (Nena), sus hijos Candy, Hamlet, Erick, Witman y varios nietos. Su cadáver estuvo expuesto desde este miércoles en la funeraria Blandino, desde donde fue llevado a la Catedral de Santiago, donde se le hizo una misa de cuerpo presente y de ahí sepultado en el cementerio de El Ingenio.